Más allá de las competencias locales, en las que está lejos en la Liga Profesional y sigue en camino en la Copa Argentina, el plato fuerte de Boca estará en la Copa Libertadores, en la que se encuentra primero en el Grupo F con un panorama optimista para pasar de ronda. Además, el oficialismo intentará reforzar el equipo con el fin de cerrar su mandato con algún éxito deportivo y así buscar la reelección.
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De esta forma, el objetivo del club es el de reforzarse en todas las líneas para brindarle más opciones a Almirón en el armado del once y no sufrir por demás algo que lo tuvo a maltraer en el último tiempo: las lesiones. Sin embargo, esto estará estrechamente relacionado a posibles salidas que pueda haber en el plantel.
En cuanto a los refuerzos, el primer apuntado es el colombiano Jorman Campuzano, quien está a préstamo en el Giresunspor de Turquía, el DT lo conoce por su paso en Atlético Nacional y lo quiere de regreso, y quien estuvo en el radar azul y oro en el último libro de pases y sigue en carpeta es el zaguero Lucas Merolla, quien queda libre en junio de Huracán y también cuenta con el fuerte interés del Mazatlán de México.
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Por su parte, en Boca ya cuentan con la salida de Agustín Almendra, quien estuvo apartado del plantel desde el ciclo de Sebastián Battaglia y tiene todo encaminado para llegar a Racing con el pase en su poder a mitad de año, y la posible marcha del delantero Nicolás Orsini, quien no tiene continuidad en el primer equipo y tiene el interés de Godoy Cruz y Central Córdoba.
En esta línea, el club estará atento con el futuro del lateral izquierdo de 18 años Valentín Barco, joya del club que tomó un rol protagónico en Primera tras la llegada de Jorge Almirón, tuvo muy buenas actuaciones y ahora estará ante los ojos de los grandes clubes de Europa con su participación en el Mundial Sub-20 con la Selección Argentina de Javier Mascherano. De hecho, el City Football Group lo sigue de cerca.
FUENTE: TyC Sports
