Cada vez son más los barrios donde los vecinos se organizan e instalan estos equipos, con la colaboración de la Municipalidad.
Es una tendencia que crece entre los distintos barrios de Yerba Buena: preocupados por la inseguridad, los vecinos se organizan y compran equipos de alarmas e iluminación para protegerse. Con el apoyo del municipio, instalan uno o dos sensores por cuadra y tratan de estar atentos para salir en auxilio de las víctimas, en caso de que las haya.
Durante el fin de semana largo se estuvieron colocando estos equipos en el barrio Loma de Imbaud. En algunos sectores ya están en funcionamiento, mientras que en otros todavía se encuentran en la etapa de instalación. Los artefactos se adhieren a una columna, generalmente ubicada en la esquina o a mitad de cuadra. Están compuestos por un sensor, un altoparlante y un reflector.
“Los vecinos nos encargamos de comprar los equipos y los controles remoto, y la Municipalidad se ocupa de la instalación”, comentó una mujer que vive en calle Federico Leloir al 200. El precio que abona cada vecino -agregó- depende de la cantidad de casas que cubre cada alarma, sumada a la cantidad de controles que desea adquirir cada familia. De esta manera, algunos grupos familiares pagaron $ 1.200, mientras que a otros les costó $ 3.000, por ejemplo.
Un matrimonio que vive en la zona explicó cómo funciona este sistema: “cada uno tiene un control remoto con dos botones: uno para encender la luz del reflector y otro que activa un sonido breve, que sirve para avisar que alguien está llegando a su casa. Ahora, si la persona corre peligro o se ve amenazada, puede tocar los dos botones a la vez y activar de esa manera una alarma mucho más ruidosa que no dejará de sonar en un lapso de tres minutos”.
A cada cuadra, los vecinos repiten que tomaron esta determinación porque ya no saben qué hacer para protegerse de los delincuentes. Señalaron que los delitos más comunes son los arrebatos y robos contra la propiedad.
Precursores
La idea nació en el barrio Marti Coll. Un hombre que vive allí relató que comenzaron a reunirse los vecinos hace aproximadamente cinco años. “Nos enteramos de que teníamos muy pocos efectivos policiales y había una ola de robos muy grandes, entonces no tuvimos más alternativa que hacer algo los vecinos”, contó. Como primera medida, crearon un grupo de Whatsapp organizado, donde todos los vecinos estaban alertas y cada uno tenía una tarea asignada para hacer prevención.
“Tuvimos un éxito bastante importante. En aquel momento llegamos a tener 15 robos en 40 días y lo llevamos a cero durante más de tres años, hasta hace unos días que le robaron la bicicleta a un vecino. Pero nos permite identificar situaciones sospechosas al instante. No vamos a terminar con la delincuencia, a eso lo tenemos claro, pero sí la podemos combatir y reducir”, expresó. Sin embargo, en noviembre del año pasado los vecinos se reunieron en Catamarca y Zavalía para exigir más seguridad. Denunciaron que sufrían arrebatos muy violentos.
Las autoridades municipales convocaron a este vecino para que se sumara al área de seguridad. “Comencé a participar de las reuniones vecinales y llevamos este sistema a varios barrios. Siempre los vecinos quedaron contentos”, remarcó el hombre, quien pidió proteger su identidad.
El secretario de Seguridad de Yerba Buena, Mauricio Argiró, explicó que los equipos “se instalan en tramos de no más de 200 metros, que es lo que uno puede ver linealmente al salir a la calle. Y se activa la alarma si se ve algo sospechoso”.
Cuando recién asumió el intendente Mariano Campero, esta idea era una prueba piloto. Casi dos años después, Argiró destacó: “esa prueba ya está solidificada y da buenos resultados. Se expandió al barrio 120 viviendas, a calle Bolivia, a la zona de Horco Molle, a la Cariola, al barrio San Expedito y otros lugares más. Esto está abierto a todos los vecinos de Yerba Buena. Queremos avanzar a la mayor cantidad de lugares posibles”.
En cuanto al funcionamiento, Argiró destacó que hay una comunicación constante con el sistema 911y el Centro de Monitoreo. “Queremos tener un centro de monitoreo de las alarmas. Queremos poder ver en qué lugar se disparó la alarma. Ya lo gestionamos a nivel nacional y fue aprobado”, dijo.
Por último, aclaró que no siempre los vecinos corren con gastos. “Hay sectores vulnerables donde tratamos de subvencionarlo, en otros se reparte el costo con los vecinos pero la intendencia costea al menos el 50% ciento”, aseguró.
Los últimos casos
UN PARTICIPANTE DEL TRASMONTAÑA.- Un joven oriundo de La Pampa, que había venido a Tucumán para participar del Trasmontaña, fue víctima de la delincuencia el sábado a la tarde. Según denunció, le sustrajeron de la vereda de calle Leloir al 500 la bicicleta con la que iba a participar de la competencia. El rodado, que está valuado en $ 90.000 y ya había sido vendido por los ladrones, fue recuperado por la Policía.
UNA BANDA DEDICADA A ABRIR AUTOS.- La Policía detuvo, el martes pasado, a una banda delictiva compuesta por tres hombres y dos mujeres que se dedicaba a robar pertenencias del interior de los autos utilizando inhibidores de alarmas. Cayeron cuando circulaban en un Chevrolet Corsa negro por la avenida Presidente Perón primera cuadra tras una intensa persecución.
ENTRARON DOS VECES EN UNA NOCHE.- El Centro Médico Sarmiento Galeano fue blanco de delincuentes dos veces en una misma noche, hace una semana aproximadamente. Los ladrones forzaron puertas y ventanas, y se llevaron cuatro computadoras, un televisor y juguetes para los niños.
LES ROBARON CUANDO SALIERON A VOTAR.- Hace dos domingos, una familia salió de su casa ubicada en calle Frías Silva al 800 para ir a votar. Cuando regresaron se encontraron con dos delincuentes dentro de la vivienda. Luego de forcejear con las víctimas, los ladrones huyeron en un Peugeot 208 llevándose un celular. La Policía los atrapó más tarde. La noche anterior ya se habían producido otros dos escruches en Yerba Buena.
“NOS PREOCUPA LA INSEGURIDAD, LA SUFREN YERBA BUENA Y TODA LA PROVINCIA”
“Tenemos pensado poner más cámaras en el Centro de Monitoreo y ya estamos convocando a la Policía Municipal. De todos modos, aunque reconozco que son muy pocos los efectivos, los que están hacen un muy buen trabajo, con el comisario Sergio Suárez a la cabeza”, destacó el intendente de Yerba Buena, Mariano Campero. “Nos preocupa la inseguridad, la sufren Yerba Buena y toda la provincia. Por eso estamos haciendo acciones concretas preventivas, como controles de vehículos. En los últimos días hubo muchos casos en que la fuerza recuperó lo robado, como la detención de una banda y la bici que le sacaron a un ciclista del Trasmontaña. Estamos trabajando en conjunto”, remarcó. Consultado sobre el delito que más se repite en Yerba Buena, señaló que lo que más hay son escruches. “No tenemos índices de criminalidad sobre violaciones o asesinatos; tenemos problemas con escruches o hurtos. Eso se resuelve con presencia en la calle”, sostuvo.